Laboratorios de multitud, un oxímoron revolucionario

> Presentación

Aciertos y errores del modelo de Zaragoza Activa-La Azucarera. Ideas a partir del post Hacia un Manifiesto de los Espacios de Nueva Generación.  

Probablemente Zaragoza Activa-La Azucarera (Ayuntamiento de Zaragoza, 4,000 m2 de fábrica rehabilitada. 2009) no sea un laboratorio ciudadano al uso, en todo caso es un modelo en mutación constante que está desarrollando algunos programas y actividades propias de un Lab. Pero conviene identificar la evolución que hemos tenido en nuestros cinco años y pico de vida: un centro de emprendimiento e innovación social, diseñado a partir de la obsolescencia de los centros cívicos de participación, que poco a poco muta hacia laboratorio para multiplicar nuestro impacto, propagar ideas y atraer talento.

1.- Laboratorios de multitud, oxímoron revolucionario

¿Es sostenible mantener un laboratorio ciudadano para dos docenas de entusiastas?

Quizá porque inicialmente nunca nos propusimos ser un Lab, hemos creado un modelo: Ecosistema colaborativo de emprendimiento, creatividad e innovación de multitud. Lejos de la imagen de pequeño laboratorio frecuentado por una docena de apasionadas, Zaragoza Activa – La Azucarera recibe 300.000 visitas/ usos año, gracias a programas base que actúan de gancho, como la Biblioteca para Jóvenes Cubit o Zona Empleo, pero también por su intensa agenda de actividades formativas y divulgativas (500-600/año) y su vocación de mayorías (Más de 6,000 miembros están en su propia red ZAC).

2.- Transiciones blandas

El insalvable gap entre el proto maker-activista-emprendedor y el chaval del barrio que pasaba por ahí

Somos un ecosistema de multitud porque queremos transformar a escala ciudad. No queremos ser un Lab que inspire cambios, queremos precipitar nosotros mismos los cambios. El ideal del maker-activista-emprendedor es la cima de nuestro rol de usuarios, pero nos interesa también el resto de la inmensa mayoría. Nuestro modelo establece un conjunto de capas que facilita una transición blanda entre ellas, donde lo importante no es sólo la meta sino propio el camino. Desde el chaval que entra libremente por la puerta para conectarse a Internet en la Biblioteca Cubit hasta el “proto”, se crean itinerarios naturales que rompen las rigideces de los sistemas formales de la administración: Serpiente Roja >> BJCubit >> red ZAC >> Actividad divulgativa >> InfoActiva >> No - Master >> Yuzz >> Semillero de Ideas >> La Colaboradora >> El Altillo >> Vivero de Emprendedores >> ThinkZAC >> El objetivo no es que todo el mundo realice este itinerario, el objetivo es cada ciudadano se deslice por las capas como quiera.

3.- Ecosistemas locales y más allá

Hackear la administración desde dentro

Todo lo mencionado hasta aquí no tiene sentido ni viabilidad alguna si se plantea desde los viejos corsés de la administración. La centralidad, la verticalidad, el liderazgo asimétrico, la ventanilla, la subvención, la feria y la moqueta deben dar paso a un modelo mucho más generoso, permeable, en red, horizontal, transparente... Los ecosistemas son más potentes en tanto en cuanto son más incluyentes y conectacos e interdependientes, no sólo a nivel local sino a nivel regional, nacional e internacional. De ahí, nuestro laboratorio nómada ThinkZAC para subsanar nuestra ceguera localista.

4.- Cuarta dimensión

¿Quién manda aquí?

El enfoque del cuarto sector, entendido como el espacio de confluencia de lo privado aportando espíritu de innovación y que se impregna de valores cada vez más sociales; de lo público aportando músculo y seguridad jurídica; y de lo social que aporta masa crítica y sentido de comunidad; crean un magma interesante para la gobernanza de estos nuevos modelos. El proyecto piloto La Colaboradora -coworking P2P- con un funcionario que coordina, unos conectores que lideran y una asamblea que mandata, nos está enseñando el camino a seguir.

5.- Espacio mediado. Redes abiertas

Más allá del hardware

Todos los espacios, incluso los Labs indefectiblemente ligados a un edificio-marca (Como la Azucarera o Serrería Belga) son muchísimo más que sus propias estructuras duras. No me refiero sólo a los ricos y complejos procesos internos de los que se dotan, sino a la idea de que son redes que sobrevuelan y clonan los ecosistemas físicos en el espacio virtual. Aunque todos somos conscientes de esto, casi nunca ponemos el empeño necesario en esas arquitecturas virtuales. En modo beta permanente, nosotros nos lanzamos hace ya dos años con nuestra propia red social ZAC, liberando y haciendo público la información de los eventos (muchos siguen alimentando Facebook), creando un sistema de moneda virtual ZAC Coins y una librería de logros virtuales.

6.- Retorno Social

Pero ¿cuántas personas producen/capturan cuánto valor?

El mejor indicador son las personas. Un centro vacío no es un centro, es un vacío. Nuestra fórmula para medirnos es conocer el valor producido/capturado. Hasta la fecha el SROI, Retorno social de la Inversión es el mejor denominador común del que nos podemos dotar, sobre todo para justificarnos ante la ola de recortes y racionalización de fondos públicos.

7.- Conexión Innovación – Cultura

Las conexiones improbables y necesarias

Los espacios más productivos serán aquellos que reduzcan las normas y los reglamentos al mínimo posible. No hay creatividad sin libertad. No hay innovación disruptiva sin conflicto. Un espacio de innovación no puede divorciarse del arte y la cultura. El arte es el único camino para reencontrarnos con la libertad, que es inherente a la condición humana. Nosotros aún estamos buscando cuál es nuestro papel, por ejemplo con Made in Zaragoza.

8.- Roles

La actitud “trans”

Un aspecto clave de las nuevas organizaciones transware son los roles que adoptamos cada uno. Paralelo al proceso de confluencia del denominado cuarto sector, se vislumbra un proceso de confluencia de papeles. Los funcionarios, los investigadores, los activistas, los makers, los artistas, los emprendedores… son roles sociales que van a confluir entre sí y tenderán a ser una misma persona. Es el prosumidor del futuro que ya se empieza a advertir. Paradójicamente la especialización radical de la sociedad nos va a acabar llevando al punto de partida, donde los hombres y las mujeres hacían de todo, porque estamos compensando con creces nuestras limitaciones de tiempo y conocimientos con herramientas cada vez más versátiles y con redes cada vez más eficientes.