Entre 2000 y 2015, la producción de ropa se duplicó en el mundo hasta superar los 100.000 millones de prendas anuales. Hoy, más del 30% de la ropa que puebla los armarios europeos no se han usado en, al menos, un año. Se calcula que la moda es responsable de hasta el 10% de las emisiones de efecto invernadero producidas por el hombre y es la segunda industria que más agua contamina. ¿Cómo se ha llegado hasta aquí y qué supone para comunidades alrededor del mundo?
Laura Villadiego: coordinadora de Carro de combate y actualmente investigando el impacto de la moda-basura, el slow fashion y las posibles alternativas de producción y consumo.